Hay más calles destruidas en Guaymas de las que pensábamos. El huracán Jimena dejó a Guaymas en caos. Además de las casas destruidas, de la iglesia a sin cúpula y sin techo, de los muebles, ropa y electrónicos que ahora yacen en las calles tenemos las principales avenidas y varias calles dentro de las colonias llenas de montañas de tierra y escombros. Los semáforo de los grandes cruceros no están funcionando por lo que cruzar las calles en auto se a vuelto casi una misión suicida.
Las autoridades han avisado que estaremos sin agua durante los próximos 15 o 20 días. Han pasado solo 3 días sin agua y las consecuencias empiezan a notarse. La gente va por las calles como zombies malolientes, sudorosos y con tierra en sus ropas. ¿Como pasamos 15 días sin agua, sin poder limpiar lo que Jimena dejó a su paso, sin poder lavar los platos, sin lavar ropa y por supuesto sin lo básico, el baño y la higiene personal. Por esto las pocas purificadoras que hoy aún tenían agua veían colas de 3 o 4 horas. Nosotros. después de 3 horas y con un par de garrafones en la mano no alcanzamos a abastecernos.
Los pequeños comercios parecen como saqueados y los 2 grandes, Soriana y Ley ven a más de 100 personas en fila por cada caja y los pasillos desordenados y medio vacíos ya no ven los esenciales, el agua, la leche, el pan, las carnes frías, las toallas húmedas, el café, etc.
Hemos intentado comunicarnos con las compañías con pipas de agua y no hemos tenido respuesta. Esto ha hecho que muchos optaran por huir del puerto a tierras mejores, más secas, más ordenadas, con agua; y la carretera está saturada, embotellada y lenta. Por esto también las gasolineras sufren de desabasto. Hoy a las 5 apenas alcanzamos gasolina "de la roja" en una de las pocas gasolineras que aún daban servicio.
Del trabajo ni hablar; la mayoría de los comercios se encuentran cerrados, limpiando, reorganizando, sanando.
Guaymas es en este momento una verdadera jungla donde los habitantes se notan un poco agresivos, confundidos y asustados.
La que escribe reporta desde una verdadera trinchera donde la solidaridad de los vecinos podrían ayudarnos a encontrar la tan necesitada agua para poder aguantar en el puerto por lo menos unos 3 o 4 días más.
Las autoridades han avisado que estaremos sin agua durante los próximos 15 o 20 días. Han pasado solo 3 días sin agua y las consecuencias empiezan a notarse. La gente va por las calles como zombies malolientes, sudorosos y con tierra en sus ropas. ¿Como pasamos 15 días sin agua, sin poder limpiar lo que Jimena dejó a su paso, sin poder lavar los platos, sin lavar ropa y por supuesto sin lo básico, el baño y la higiene personal. Por esto las pocas purificadoras que hoy aún tenían agua veían colas de 3 o 4 horas. Nosotros. después de 3 horas y con un par de garrafones en la mano no alcanzamos a abastecernos.
Los pequeños comercios parecen como saqueados y los 2 grandes, Soriana y Ley ven a más de 100 personas en fila por cada caja y los pasillos desordenados y medio vacíos ya no ven los esenciales, el agua, la leche, el pan, las carnes frías, las toallas húmedas, el café, etc.
Hemos intentado comunicarnos con las compañías con pipas de agua y no hemos tenido respuesta. Esto ha hecho que muchos optaran por huir del puerto a tierras mejores, más secas, más ordenadas, con agua; y la carretera está saturada, embotellada y lenta. Por esto también las gasolineras sufren de desabasto. Hoy a las 5 apenas alcanzamos gasolina "de la roja" en una de las pocas gasolineras que aún daban servicio.
Del trabajo ni hablar; la mayoría de los comercios se encuentran cerrados, limpiando, reorganizando, sanando.
Guaymas es en este momento una verdadera jungla donde los habitantes se notan un poco agresivos, confundidos y asustados.
La que escribe reporta desde una verdadera trinchera donde la solidaridad de los vecinos podrían ayudarnos a encontrar la tan necesitada agua para poder aguantar en el puerto por lo menos unos 3 o 4 días más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario