miércoles, agosto 26, 2009

Don´t call "the guy"

Viviendo en una casa de mujeres un buen zapato y un cuchillo para mantequilla se vuelven toda la herramienta que necesitas. Bueno, no que necesitas, pero si la única que utilizaras. Así que cualquier desperfecto que necesite herramienta más sofisticada debemos llamas al especialista para que haga las reparaciones correspondientes.
Esta casa, nuestra espaciosa e iluminada casa en la que tan cómodamente vivimos, con excelentes vecinos y bien ubicada, no ha venido sin sus desafíos.
Resulta que no puedes bañarte sin que se inunde la cocina, que la llave del patio tiene fuga, que un par de focos no están conectados a ningún switch (encienden al enroscar el foco), uno de los aires acondicionados, el que más se usa, decidió tirar el agua por enfrente, dentro de la casa y no por detrás, en el patio, como cualquier aire normal. La regadera eléctrica solo tiene 3 temperaturas, helado, supercaliente y megahirviendo.
El colmo fue el fin de semana que viajamos a Hermosillo y regresamos para encontrar la cuadra entera con un pequeño canal de agua corriendo a la orilla de la calle proveniente de mi casa. La tubería bajo el lavatrastes tenía fuga y aún con la llave cerrada el agua se tiraba.
Así estuvimos unos días hasta que me decidí a hablarle al plomero. Esposo, como típico hombre se opuso a hablarle al sujeto e inmediatamente se recostó bajo la tubería y en un momento el problema estaba resuelto.
Al parecer hay algo en el adn masculino que siente una increíble aversión por los plomeros, electricistas y "máistros". Así que hemos aprendido algo nuevo; si usted quiere que algo en su hogar sea reparado, solo amenace a su hombre con hablarle "al sujeto" y verá que rápido se pone manos a la obra.

1 comentario:

1st Mate dijo...

Si tu lo necesites, conozco un plomero.